Cuando sabemos que el amor de Dios es incomparable, estamos también conscientes que tenemos que pedir también de El esa sabiduría y enseñanza que nos permitirá agradarlo.
Existen muchas citas bíblicas que nos hablan de su poder y de su inmensa sabiduría con la cual creó para todas sus maravillas dándonos una tierra llena de beneficios.
Al poner atención y enfocarnos en la palabra de Dios entendemos que Él nos puede dar toda la inteligencia, prudencia y sabiduría que necesitamos para andar confiadamente por su camino de rectitud.
Es importante entender que también en ocasiones necesitamos una palabra de reprensión que nos haga ver esas fallas que nos hacen salirnos de la voluntad de Dios, instruyendonos para volver a encontrar la verdad.
Dios ha prometido otorgarnos el conocimiento y la verdad para poder alcanzar su Reino y para esto debemos tener un constante contacto directo y comunión con El, que podemos conseguir mediante la oración diaria.
El verdaderamente satisfactorio cuando hablamos de esas maravillosas promesas que nuestro Padre Celestial nos ha regalado por medio su Hijo amado Jesucristo, sobre el cual debemos tener puestos los ojos y esperanza de salvación.