Cada día los seres humanos pasamos por diferentes situaciones en las que nos hace falta escuchar o leer mensajes o citas alentadoras que nos devuelvan las fuerzas y la fe que necesitamos.
Entre los afanes del diario vivir es importante alimentar nuestro espíritu, lo que podemos conseguir con el estudio de la palabra de Dios.
Es parte esencial en la vida de un cristiano el estar en constante comunión con nuestro Señor Jesús y por esa razón llenar nuestra mente con mensajes de aliento son una excelente opción para mantenernos en un estado de paz y tranquilidad.
Dios nos dejó como herencia su palabra para alimentarnos espiritualmente y para adquirir sabiduría y podamos crecer en el servicio a su obra.
Por medio de la lectura constante de la biblia alimentamos nuestro espíritu y nuestro entendimiento dando paso a la obediencia, logrando con ello agradar a Dios.
Cuando usamos la oración como alimento espiritual nos fortalecemos para seguir en el camino hacia Dios de una manera firme y segura de que estamos respaldados por el Todopoderoso.